¿Por qué Rapa Nui?

argumento primero:              no existen los semáforos.
argumento segundo:             centro único y exclusivo de la cultura y sociedad Rapa Nui.
argumento tercero:               «te pito o te henua», el ombligo del mundo.

Deus ex machina

Mientras la moneda bailaba caprichosamente en búsqueda del lado más conveniente sobre el que posarse, todo a su alrededor estaba gobernado por un asfixiante aire provocado por la duda de los acontecimientos venideros. 

Hace unas horas, concluyó que debía dejar de rodar. Pese a que durante días llevaba mostrando únicamente uno de sus lados más románticos y, no sólo con eso, cuando todo empezaba a organizarse para poner nuevo rumbo, algo sucedió. «Deus ex machina». O lo que es lo mismo, una expresión latina utilizada actualmente para referirse a un elemento externo que resuelve una historia sin seguir su lógica interna. 

Y así fue, mi particular elemento externo fueron los millones de habitantes que resolvieron votar al Partido Popular para provocar un cambio en el gobierno español. Mayoría absoluta, nada más y nada menos. Como ente público estatal, RTVE define políticamente a sus directores generales. Cambio de gobierno, cambio de planes. Todo lo ofrecido durante el anterior gobierno queda en stand by a la espera de nuevo personaje politizado que defina las líneas de actuación para los próximos cuatro años. Y no suele suceder de una semana para otra. Quién sabe si todo vuela por los aires o si seguirá igual. Veremos. 

Entretanto, sigo a la mía.

Cara o cruz

Corazón

Hoy, bueno, a decir verdad hace unos días, aprendí algo más sobre el proceso de reconocimiento de la vida. Si bien el destino existe, también lo hace el corazón. 

No obstante, todo debe filtrarse a través del aprendizaje, lo cual conlleva un proceso preciso de prudencia y experiencia. Es altamente resbaladizo —incluso peligroso—confiar en el corazón, pues lidia en el plano incontrolable de los sentimientos. 

Sin embargo, en la isla cultivé la semilla de algo nuevo. El amor por la vida, ya no sólo el deleite. Creo empezar a estar preparado para desertar del destino e instruirme del corazón. 

Así pues, si el tono del Nokia N81 resuena en medio de la noche, traicionaré al corazón en favor del destino, único e indiscutible guía hasta el momento. Porque para aprender del corazón, sólo hay un camino posible: traicionar fríamente tus sentimientos aún sintiendo un profundo arrepentimiento por ello, acabar por pedir perdón e intentar entonces, regresar al origen de la pasión desbocada.