La suerte te llega, dicen.
No obstante, nadie que no camine atrevido y sin rumbo acierta con la señal que le indica los pasos a seguir. Suele pasar que a veces llega dada, otras veces de situaciones inimaginables e inesperadas. Vete tu a saber.
El giro que se viene apareció de una iniciativa tan descabellada como desconcertante. Sin embargo, y mira tu por donde, acabó por rescatar ese camino enterrado hace algún tiempo atrás e iniciar un nuevo capitulo de mi travesia vital.
Hay veces, muchas veces, la mayoria diria, que la suerte se encuentra.
Me vuelvo. Me voy a vivir a Perú.
Que alegría, sigo riendo.
No obstante, nadie que no camine atrevido y sin rumbo acierta con la señal que le indica los pasos a seguir. Suele pasar que a veces llega dada, otras veces de situaciones inimaginables e inesperadas. Vete tu a saber.
El giro que se viene apareció de una iniciativa tan descabellada como desconcertante. Sin embargo, y mira tu por donde, acabó por rescatar ese camino enterrado hace algún tiempo atrás e iniciar un nuevo capitulo de mi travesia vital.
Hay veces, muchas veces, la mayoria diria, que la suerte se encuentra.
Me vuelvo. Me voy a vivir a Perú.
Que alegría, sigo riendo.